La última noche del año tiene un significado especial. Aunque también hay quien asegura que "sólo es una noche más", lo cierto es que muchos vemos el cambio de año como una buena oportunidad para reflexionar, para valorar tanto lo que nos ha pasado en los últimos meses como lo que queremos que suceda en los próximos 365 días.
En nuestro país la forma más común de despedir el año es comiendo uvas al ritmo de las campanadas, celebrándolo con amigos y familia. Pero no en todo el mundo se sigue el mismo patrón:
- En Ecuador la tradición más popular es quemar un monigote a las 12 de la noche, en las calles de la ciudad. Él representa el año que termina, que se va...
- Además de la quema de muñecos y de los fuegos artificiales, destacamos otra curiosidad de Perú: allí, la ropa interior de la noche tiene que ser amarilla, y no roja...
- En Uruguay son previsores y empiezan los festejos de fin de año al mediodía del 31 de diciembre. Para alejar energías negativas es común tirar un cubo lleno de agua desde el balcón de casa.
- Más allá de tirar (o no) los trastos viejos, en Italia lo que no puede faltar es el plato de lentejas durante la cena.
Por cierto, recordad que mañana 1 de enero en Aula Gastronomica os invitamos a comer lentejas de la suerte con nosotros. Podéis venir entre las 14:00 y las 22:00 a las instalaciones de Aula Catedral (C/Sagristans 5, entresuelo, Barcelona). ¡Os esperamos!
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